Buscar este blog

lunes, 2 de febrero de 2009

¡Finalmente!


Finalmente podré escribir estas tristes historias que siento dentro de mi. Ya no habrá amor en vano, ya no habrá amor tirano. Ya no habrá días de espera y noches que desesperan.
Seré yo y yo misma en este mundo. Será mi amiga la soledad quien me acompañe, esta vez con mayor seguridad y con un positivismo extraño. Seré yo la que le ponga riendas a mi vida: no más dependencia inocente. Correré hacia mi destino.
Cueste lo que me cueste me encontrarán volando. Gracias por haberlo hecho...fue lo único que escribiste bien en nuestra historia. Fue la acción más sabia, dado que tu egoísmo y vagueza me dejaron deshecha y ahogada, víctima de mis propias lágrimas.
Buen día, buenas tardes, buenas noches. Nos veremos, quizás, en nuestros sueños... nada más.